Hola,
Soy Roberto
FOTÓGRAFO DE MASCOTAS
Por desgracia, todo acabó. Ahora estará saltando y corriendo con los angelitos, bueno, o con los perritos de los angelitos.
Después llego Dino, todo un terremoto. Al principio sentía como si estuviera traicionando a Loky, pero pronto me di cuenta de que tenía sitio para los dos.
Ahora es mi mejor amigo, mi modelo de pruebas en este nuevo y apasionante camino como fotógrafo de animales.
Me dirijo a todos los apasionados de los animales, que queréis guardar las mejores instantáneas de vuestros amigos, su amor sincero y ver siempre esa mirada que nos regalan cada día.
Este proyecto quiere difundir la unión entre personas y animales y los vínculos que nos unen para siempre. El amor de un perro es incondicional.
Y quiero también que sirva como recuerdo de mi gran amigo Loky que tanto hizo por mí. Siempre estaré agradecido todo el amor que me distes, en todos los momentos. Y recordaré con cariño todo lo que pasamos juntos.
Gracias de corazón Loky y Dino.
Voy a contaros
mi historia
Cuando Loky apareció en mi vida, todo cambió.
Yo no lo elegí, fue él quien salto sobre mí mientras descansaba en el sofá de casa. Mi hija Laura, que era voluntaria de una asociación protectora de animales, lo trajo un fin de semana. Desde ese instante nos convertimos en amigos, él me curaba del estrés diario, siempre estaba contento y me trasmitía su felicidad.
Loky es la inspiración para este proyecto. Mi idea es hacer fotografías profesionales de perros y gatos, pero también de todos esos pequeños amigos que nos acompañan como nadie en nuestra vida. Fotografías que vayan más allá de guardar un bonito recuerdo de nuestras mascotas, quiero retratar su alma, su mirada, sus sentimientos.
Toda la experiencia que he ido adquiriendo en fotografía social estos años de profesión, quiero volcarla en capturar instantáneas que nos recuerden todo el cariño que nos da nuestro perro, nuestro gato, nuestra iguana, nuestro hamster...
Loky estuvo con nosotros muy poco tiempo, pero lo suficiente para que se sintiera feliz, querido en nuestra familia como uno más, para que se quedará en nuestro corazón para siempre.